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Huerta Naves, Luis | Reseñas históricas | Educación | Profesores | Soto | Sobrescobio | Comarca del Valle del Nalón | Centro de Asturias | Montaña de Asturias | Asturias | Principado de Asturias | España | Europa.
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Descripción
El prestigioso docente republicano Luis Huerta Naves fue una de las grandes figuras asturianas de su tiempo, cuyos éxitos profesionales le dieron notoriedad y reconocimiento en las décadas anteriores a la guerra civil española y luego padeció la represión franquista, el exilio y el olvido.
Este maestro, pedagogo, higienista pionero y escritor nace el 9 de marzo de 1889 en San Andrés (concejo/municipio de Sobrescobio), en el seno de una familia de prole numerosa, en la que diecisiete de los dieciocho hermanos de Luis fallecieron antes de 1920, sobreviviendo únicamente Plácido, médico de la Armada —quien le auxiliará económicamente en momentos de dificultad—, y él mismo.
Tras cursar los estudios de Segunda Enseñanza en el Instituto Jovellanos de Gijón, y siguiendo la estela de su padre, que también ejerció de maestro, hace Magisterio en la Escuela Normal de Oviedo, donde se titula en 1910. Ese mismo año oposita al Magisterio Nacional y logra el número 1.
Sus primeros destinos docentes son las escuelas vacantes del distrito de la Universidad de Oviedo y el Instituto del Colegio de la Caridad de La Calzada, de Gijón. En 1911 pasa a ejercer en la escuela de Santa Doradía, con un sueldo de 1.650 pesetas. Es entonces cuando se entrevista con Pedro Poveda, canónigo de Covadonga, para fundar una escuela de maestros, que tendrá su sede en la calle Santa Lucía, número 19, de Gijón. Además, junto a José María Palacios, publica Ensayo de un proyecto pedagógico para la fundación de una Institución Católica de Enseñanza. Y en 1912 edita Enseñanza Moderna. Revista Quincenal Ilustrada de Educación Social.
En 1914, una beca concedida por la Junta de Ampliación de Estudios le permite estudiar el método de enseñanza Montessori en Roma, asistir a la Facultad Internacional de Paidología en Bélgica y a los estudios de Experimentación biológica y Química fisiológica impartidos por el profesor Gonbau en la Universidad de Gante. Además, asiste a otros cursos monográficos de Sociología infantil y juvenil y científico-penitenciarios, obteniendo el título de Ciencias Paidológicas.
De regreso a España, Luis Huerta se instala en Madrid, donde incrementa su actividades como conferenciante y escritor, que le dan celebridad. Influido por las nuevas corrientes pedagógicas europeas, con las que había tomado contacto durante su estancia como pensionado, da a conocer sus postulados renovadores en numerosas tribunas y en abundantes obras: La educación sexual del niño y el adolescente, con la que logra un accésit en el premio convocado por la Sociedad Española de Higiene; Ortografía española. Método fácil y rápido para los alumnos de las Escuelas Normales, Escuelas de Comercio y, en general, al magisterio primario; Las artes en la escuela. Libro de iniciación al estudio de las artes útiles, de las artes bellas y de las artes liberales, aprobado como libro de lectura en la Segunda República, que sería prohibido y destruido por las nuevas autoridades franquistas, al igual que otros cuatro títulos suyos, Salud, Dicción y redacción, Derecho usual español y Eugénica, Maternológica y Puericultura (único tratado de eugenesia escrito hasta entonces por un español).
Son también muchas las revistas que publican sus trabajos: El Sol, Revista de Pedagogía, Gaceta Médica Española, Revista de las Escuelas de España, Libertad, Revista de Puericultura...
En tiempos de la República lleva la sección de Pedagogía del Ateneo de Madrid, y en enero de 1936 es maestro nacional del grupo escolar Joaquín Sorolla y redactor-jefe de El Magisterio Nacional, órgano de la Asociación Nacional del Magisterio Primario.
El año de su exilio (1938), sale hacia Francia con su esposa gijonesa y el grupo de niños de la colonia de Sitges (Barcelona) y allí permanece hasta 1954. En ese tiempo de destierro, Luis Huerta, que en el pasado había formado parte de la Asociación de Trabajadores de la Enseñanza de Asturias (ATEA), preside la Federación Española de Trabajadores de la Enseñanza (FETE), en la que ya antes había tenido cargo. Asimismo, colabora en algunos actos de la colonia española y publica artículos en el Boletín de la Unión de Intelectuales Españoles.
En 1954 regresa a España para recuperar su profesión, pudiendo ejercer el magisterio sólo durante un curso académico, el anterior a su jubilación en 1959, en la escuela de niños de Getafe (Madrid).
Este firme defensor de ideales democráticos, pacifistas, cristianos y de la enseñanza pública, y contrario al laicismo de la Institución Libre de Enseñanza —de ahí que promoviese una Institución Católica de Enseñanza—, como pedagogo «no fue un gran pensador, pero sí un gran práctico que introdujo en España y aplicó las posiciones más modernas de su tiempo. Fue un pionero en promover las excursiones escolares, creó en El Escorial [del que fue alcalde], donde las condiciones eran lamentables, una Casa del Niño, impulsó la correspondencia escolar para promover el aprendizaje de la lectura, creó colonias escolares, marítimas o de altura, se interesó por el cuidado, la alimentación y la higiene...» (Carmen Diego Pérez, profesora de Historia de la Educación de la Universidad de Oviedo).
En su haber destacan también la fundación del Instituto de Medicina Social en Madrid, o su trabajo en Gijón con el movimiento scout.
Otras obras de Luis Huerta Naves son las siguientes: Filosofía de la vida práctica; Orientación eugénica del matrimonio; La Genicultura, o cultivo del genio; Asistencia social. El hogar infantil; Maternidad consciente; Las artes en la escuela. El Estado y la prole numerosa; Hacia un Estado Universitario Internacional; La prostitución, abolicionismo y mal venéreo; Natalidad controlada. Birth-control.
Bibl.: Constantino Suárez, Escritores y artistas asturianos, Oviedo, 1955; Carmen Diego Pérez, Luis Huerta, maestro e higienista (VII Premio de Investigación Rosario Acuña), KRK Ediciones, Oviedo, 2006.
Concejo de Sobrescobio
Agua y montañas, ríos y valles, caza y paisajes, reino de los urogallos y cauce del Nalón, Sobrescobio es un verdadero paraíso para deportistas ´sostenibles´ y gourmets amantes de la cocina tradicional.
Los concejos (municipios) que limitan con el Concejo de Sobrescobio son: Aller, Caso, Laviana y Piloña. Cada uno de estos concejos (municipios) comparte fronteras geográficas con Sobrescobio, lo que implica que comparten límites territoriales y pueden tener interacciones políticas, sociales y económicas entre ellos.
Comarca del Valle del Nalón
Carbonífero y minería, castilletes y museos que rememoran un pasado de industria, movimiento obrero, revolución tecnológica y kilómetro Europeo de la Cultura. En la zona alta, el Nalón —el río más largo de Asturias—, y el Parque Natural de Redes, Reserva de la Biosfera, son el contrapunto más natural.
La comarca está conformada por uno o varios concejos (municipios). En este caso: Caso, Langreo, Laviana, San Martín del Rey Aurelio y Sobrescobio. Los concejos representan las divisiones administrativas dentro de la comarca y son responsables de la gestión de los asuntos locales en cada municipio.
Conocer Asturias
«Las playas de Asturias son auténticos tesoros naturales que cautivan a todos aquellos que las visitan. Situadas en la costa norte de España, estas playas ofrecen un paisaje impresionante donde la majestuosidad de las montañas se encuentra con el bravo Mar Cantábrico.»
Resumen
Clasificación: Reseñas históricas
Clase: Educación
Tipo: Profesores
Comunidad autónoma: Principado de Asturias
Provincia: Asturias
Municipio: Sobrescobio
Parroquia: Soto
Entidad: Soto
Zona: Centro de Asturias
Situación: Montaña de Asturias
Comarca: Comarca del Valle del Nalón
Dirección: Soto de Agues
Código postal: 33993
Web del municipio: Sobrescobio
E-mail: Oficina de turismo
E-mail: Ayuntamiento de Sobrescobio
Dirección
Dirección postal: 33993 › Soto de Agues • Soto › Sobrescobio › Asturias.
Dirección digital: Pulsa aquí